17 noviembre, 2009

Frío de Noviembre

Noviembre 18, 1:00 am

El abrigo como promesa de protección contra el frío, la llovizna en perfecta parsimonia con mi caminar; más que gotas, son dientes de león que rozan el viento con aspiraciones a convertirse en la nieve que saben nunca serán.
La idea de materializar un café aguarda la esperanza de un día más, mientras el amargo sabor entre mis dedos, se abre paso cuando intento reemplazar pensamientos ya ajenos que llegan a mi mente: Un beso que se lo lleva el viento y se estrella en la nuca de la mala-educación. Pensamientos ajenos que tocan a la puerta con la tentación de reclamar como propio un corazón embriagado de libertad que por veces se ve tentado a palpitar al ritmo de los llamados en la puerta de la memoria ya añejada
Así que decido marcar el paso bajo el frío, asegurando cada huella invisible en el asfalto, para recalcar la realidad que yace bajo mi abrigo: el pecho caliente para tener la cabeza fría.
Mientras tanto, apresuro mi andar, la amenaza de llegar tarde se hace presente una vez más, como ha sido una marca de la casa durante los últimos años y me obligo a pensar más rápido y jugar con lo acontecido horas antes: -... preguntar como mi nombre llega a conversaciones prohíbidas, ciertamente no está bajo mi control (aparentemente) pero la emoción de desatar un huracán con un beso (y se escucha Sabina) es para tener en consideración, más con este clima...
De repente caigo en la cuenta que necesito escribir, me siento y me presto a sacar lápiz y papel; pero los 3 nos distraemos con ese cabello de anuncio de televisión que baila con la brisa, con el piercing diamantino que brilla al costado de la nariz, con la falda que veo por segunda vez, aquella que resguarda un tatuaje alojado en la cintura y que forma parte de mi compañera de curso; finalmente mis ideas alzan vuelo cuando escuchan mi nombre, y mucho de lo que se pensó originalmente se perdió durante el viaje que tomó el reencuentro de las ideas y Yo frente al computador.

2 comentarios:

  1. tontamente aveces cuando garúa y me da apenas chance de caminar bajo esos intentos de copos de nieve, añoraría que al fusionarse con el viento... los pensamientos.. los deseos! de que se conviertan en la misma.. surgiera efecto..... qué tanto podría escribir sobre el mundo y una nevada sorpresa! sí.. soy demasiado soñadora.
    lo que más me cuadra de este post es que deja al grande Alejo en total estado de anonimato! pudiera ser cualquier mae que caminara bajo una lluvia recién nacida. pudiéramos habernos topado y nisiquiera saber que éramos nosotros mismos!!... esa es la magia del anonimato que nos da la libertad de escribir lo que nos plazca.
    grande!
    salu2! (y que habladas las mías! jaja.)

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  2. Naaa' yo creo que se te salió la magia inesperada, esa que me maravilla cuando menos lo pensás; Re-Grande nena!

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