02 julio, 2011

Carta de un bicho

Siempre me veía, o al menos eso creía yo. Cuando estaba ahí. Sí, ahí sentado viendo el vacío, o al menos eso creo que pensaría que estaba pensando yo. Nunca quise creer lo contrario porque hubiera sido atroz; ya sabés por eso que dicen que todo es transitorio; pero que le vamos a  hacer… Los premios, la gloria, los chismes de siempre; y de repente las manos me crecían, los pies se alargaban, era como un lobo, porque me estaba transformando en lobo –en lobo de mar imagináte-. Y siempre la nocturna, el viene y va, el sinsentido, todo podía pasar y yo me lo imaginaba. Pero casi siempre todo lo detenía, justamente cuando comenzaba a convertirme en uno de esos animales que se ve por la tele, y probablemente deben existir en otro lugar o en otro planeta –porque la tele no miente, incluso cuando la enfocaban y embelesado como un idiota dejaba que las pupilas la atraparan hasta el verano siguiente-.
Pero bueno, todo era cierto hasta que me golpeaba la razón ¿o sería al revés? Siempre ignorante. Y los amigos y cuentos de siempre; de un lado a otro nos llevaban, como las nubes cargan a la lluvia y esta se suspende en la gravedad hasta que toque el suelo, ese suelo infame que devuelve a la realidad. Otro año en la vida de los minutos que son como hormigas ¿y cómo medirán el tiempo las hormigas? Seguramente lo miden por lo que hacen, y por eso son más inteligentes que yo. Sentado la veía, las cortinas de su cuarto anunciaban otra cosa, y yo  era un miope infiel ¡cobarde, embustero, genio! Era lo que se me ocurría cuándo alzaba la vista y no la veía. Pronto aparecerá, estoy seguro. Pero el calendario era cruel y ya había pasado, otro mes, otro fin de semana y siempre incompleta. Andá, salí, que allá afuera está la Luna aguardándote hasta que otro se la robe.

10 comentarios:

  1. la inspiración siempre te acecha, aguardandote cautelosamente jajaja. creo que te vigila e inesperadamente, entra por tu puerta y en ese momento te llena con su impulso y estímulo, como las hormigas, creando textos tan acertados y chispeantes como éste...
    :)

    un abrazo, escritor.

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  2. Alejo jo jo jo (ya me estoy preparando para diciembre :)

    Hola, un abrazo, espero estés bien.
    Me gustó el escrito, me acordé de la canción "La fábula del grillo y el mar" del extinto grupo centroamericano: Alux Nahual :)

    Bello ecsrito, transmite nostalgia.

    Cuidate mucho.

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  3. Cada tanto hay que descender a la perspectiva de la hormiga.

    Saludos!!

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  4. ¿Cómo medirán el tiempo las hormigas?

    Un saludo

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  5. Ohhhh kafkiano jajaja
    He regresado del infierno mismo, no es taaaan como se lo pinta.
    Saludos.
    P/D: me recuerda?

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  6. La luna nueva siempre es invisible, pero llena, no pone la cabeza hasta arriba de cosas, como a Kafka. Quién pudiera dejar de pensar y de estar en la luna.
    ¡Fantástico momento!

    Abrazo

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  7. Sal y vive, siempre que me cuentes estas cosas tan bonitas...

    Besicos

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  8. Los bichos posiblemente no se hagan tantas preguntas. Ni siquiera por qué nos roban la Luna cada cuanto.

    Pero tú sí, y eso es lo maravilloso.

    Un abrazo.

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  9. Llevamos una vida de perros y gatos definitivamente. Siempre generosa Esilleviana, gracias.

    Que sería de ese ladrón José eh? Un saludo

    No "Naty", que preparse desde ya sería parecerse a La universal jaja. (caritas felices de vuelta, ah y tendré que "youtubear" a ese grupo).

    Cuánta razón peregrino, Saludos de vuelta.

    A lo mejor con relojes diminutos Gi!

    Efectivamente salió del túnel mi estimado Palabrota, un gusto verlo de regreso.

    Esa Luna definitivamente no solo tiene efecto sobre las mareas Antonio. Un abrazo.

    Jaja definitivamente espero hacerlo Belén. Besos

    Hombre, demasiado amable con el comentario, espero que los bichos no me pregunten por qué lo escribí Juanjo ! Un abrazo

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