09 mayo, 2010

De acciones y reacciones






Embustera- Joaquín S.


Seis meses habían pasado desde aquel encuentro pasional o carnal entre Carmen y Ernesto en el apartamento 6A de San Pedro. Meses que habían transcurrido entre folletes y diretes, sin ninguna pelea que no valiera la pena resolverse en el juzgado de sabanas. Tiempo durante el cual Ernesto se sentía desconcertadamente atraído cada vez que veía a aquella mujer de pelo negro y ahora rizado, que lo intoxicaba con su manera de andar. Sin embargo la mujer de vestidos ondeantes y no menos tentadores, pensaba Ernesto, parecía un enigma andante.

Aquella noche, en el primer piso del bar esquinero de Curridabat, estaban rodeados de una comitiva de amigos de Carmen, compañía por demás inesperada. Tomando la decisión de flagelar la duda que rodeaba su cabeza, Ernesto a las 11:43, ahogó de un sorbo el mal sabor de boca que le había dejado el hecho que minutos antes, aquella mujer con la que ahora sabía con certeza que quería no solo para asuntos estéticos de borrar cicatrices; le había presentado una compañera, con la fina y sutil intención de mostrarlo como un vino ya catado; en otras circunstancias hubiera sido ideal, pero esa noche no.
-No deberías matar oportunidades de 6 meses. Le dijo mientras los demás pedían otra ronda de cervezas. - Y quién ha dicho que las he matado, yo las he aprovechado, ¡ teneló por seguro! La bofetada muda que recibió Ernesto ardió en su orgullo y comenzó a propagarse por sus pupilas de ceniza, quién como pudo respondió con tonos arteriales de amargura: - Entiendo que se desprecie lo que se tiene, pero es de tontos dejar pasar lo que se necesita.- ¿Y que necesito según vos? Le contestó con mirada entretenida Carmen, mientras el silencio entre la muchedumbre se hacía una atmósfera intolerable. Ernesto con la vergüenza en el higado se levantó, y se encaminó al segundo piso del bar.
Planeado por el azar o por el alcohol, se sentó en la barra, sin saber que a sus espaldas lo veía Lucía; quién luego de unos minutos se acercó a Ernesto, al asegurarse que estaba solo. Las ganas de Lucía por aquel tipo, tan distinto que siendo igual a todos marcaba diferencia; se sumaban a las ganas de atemperar el ego mancillado por Carmen, esa, que le enseñó a trotar sin querer correr, y a dormir a una cuarta de la estrella polar que nacía en su cadera.
Harto de estar en aquel desierto polar, de hundirse en la soledad de altamar, de fumar un cigarro con sabor a conjetura áspera y de tomar sin pensar, aceptó compartir la resaca de la mañana junto a Lucía, y mientras ella volvía del baño, Ernesto puso en su mano izquierda una servilleta doblada.
Bajando las gradas de caracol, explicó a Lucía que se despediría de alguien, atravezó el pasillo y dejando atrás 3 mesas, alcanzó a ver a Carmen, que al oído le dijo: -Las estrellas pierden su sentido sin horizonte, te quiero en puta, pero hoy me voy a la cama con otra. Y quemando con el cigarro la servilleta doblada se la puso en la mesa a Carmen, quién sostenía una cara sin expresión. A la par de la servilleta teñida de un punto negro, Carmen sostenía una copa de vino a medio acabar, y en silencio escuchaba como sus amigos cantaban un estribillo de Sabina: "Que sepas que el final, no empieza hoy"






Así como no me esperaba escribir tan pronto y romper el aviso del post anterior, tampoco me esperaba la estupenda sorpresa que signica ir al concierto de Joaquín el 12 de mayo. El tinto, mi cigarro y la música del flaco me golpearon los sentidos:Prometo no cumplir mi palabra hasta que sea necesario. Las musas hasta siempre, mi corazón para tod@s, sus buenos deseos que se reflejaron en el índice y pulgar y las ganas de brindar por lo inesperado, por todo y vosotros: Salut !
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12 comentarios:

  1. la que parecía la mala de la historia, la femme fatale, terminó sola y triste... me dio pena Carmen, no quisiera estar en su lugar.
    saludos!

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  2. Buenísimo.
    El retorno de las musas - al menos por un rato -, la música enhebrando historias, Joaquín... qué más pedir!

    Un abrazo!

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  3. "las estrellas pierden su sentido sin horizonte"

    :)
    me gusta, la cita a Sabina lo redondea!

    saludos.

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  4. No hay nada como la sinceridad extraida de un vaso... "Las estrellas pierden su sentido sin horizonte, te quiero en puta, pero hoy me voy a la cama con otra." Contudente!

    Pero como diria Sabina:
    "Por eso se que perderte
    no era quedarse sin nada
    la muerte es solo la suerte
    con una letra cambiada"


    Un abrazo :)

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  5. Pues me queda decir: Salut! :)

    Y que disfrutes del concierto.

    Abrazos

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  6. esoo! mañana nos vemos entonces, si al destino le apetece!

    Saludos! y excelente ^^

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  7. (rareza acertada...)

    Van de regreso... :)

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  8. Volviste y GRANDE!!!
    "mostrarlo como un vino ya catado" Por eso Carmen termina como termina... como dicen: "Karma is a bitch"
    Me encantó como siempre, y como siempre, seguiré esperando más noticias de Ernesto!!

    Besos

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  9. Gracias por visitarme Maga, pues que Carmen probablemente aprenderá!.

    Nuestra eMiLiA, nada como las oscuras golondrinas!

    Querida "Georgi" recibí mi beso doble de agradecimiento eterno.

    Arya, Contundente ciertamente, y si es mentira que parezca verdad!

    AdR, Conciertazo!

    Maheba, QUE POR FIN NOS CONOCIMOS!

    PaU, no merezco el grande, pero si es de vos lo acepto feliz y humilde, la vida es la liga que se te devuelva.

    Hasta siempre

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  10. Me encanta!

    qué gran descubrimiento de blog :)

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  11. Que vaya bien el concierto, pues con Sabina ya se sabe... igual le cuadra otra puta.

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  12. Muchas gracias Silvia por las palabras, sientase como en casa!

    Juanjo, jajajaja Fenómenal concierto!

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