07 marzo, 2009

Questa specie d'amore

A las 2:39 am he decidido volver a escribir en mi mural. Por qué? Por la sencilla razón que no hay que aplazar la inspiración que nos viene de golpe, aún cuando esta provenga de momentos en los cuales deseamos alienarnos de este mundo que por veces nos pareciera tan gris y carente de otros matices más coloridos.
Cuanto se puede amar a una persona, eso nadie lo puede saber; pues depende enteramente de cuan dispuestos estamos a perder. El proceso de "recuperación" al que nos vemos sometidos luego de que decidimos intentar dejar atrás toda canción, verso, libro, palabra, caricias, sonrisas y nombre que una vez nos produjo alegría; en la mayoría de las ocasiones puede asemejarse a una tarea casi imposible.
De tal modo, que la pregunta de origen existencialista surge: Quienes somos? Seremos aquellos que pre- existian antes de vernos inmersos en un sentimiento tan profundo que fue capaz de romper todos nuestros esquemas, o si por el contrario somos los restos de lo quedo del aquel ser que se despojo de toda concepcion adquirida y fue capaz de darlo todo con esperanza de creer en aquello que se asemejo a la felicidad, a esa hermosura, ese sentimiento platonico del que tanto nos han relatado tantos poetas...
Confieso que no me considero capaz de dar una respuesta, pues luego de sentir eso... tan tierno y violento como lo es el amor, prefiero sentir la incertidumbre que ello me brinda, el ser capaz de soñar aquello que no es perfecto pero que se acerca a lo que simplemente se ha de soñar.

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